POEMA A LA MADRE AUSENTE

Tuve desvelar para que yo durmiera, tuvo que aguantar hambre para yo comiera, tuvo que sacrificar sus quehaceres  para jugar conmigo.
Jamas dude de ella cuando me enseño a caminar, siempre estuvo conmigo cuando mas la necesitaba.
Hoy se que tu cuerpo no esta conmigo, pero tus palabras resuenan en mi mente y corazón,  muchos me dicen que estas muerta, pero se que tu vives en mi, tu sangre alimenta mis venas, tus consejos me orientan  por el buen sendero de la vida.
SALUDOS, BENDICIONES Y LARGA VIDA A TODAS LA MADRECITAS LUQUEÑAS Y DEL MUNDO...